Reequipación completa de la Sima Z-3 de Valsalobre (Cuenca)


INTRODUCCIÓN

Esta cavidad que tradicionalmente ha tenido un marcado carácter deportivo, ha pasado en 2017, junto a la Manuel Mozo y la Juan Herranz II, a formar parte de las grandes cavidades de la Serrezuela de Valsalobre, por su nueva profundidad, -131m, y por descubrirse en ella la existencia de un curso que, siguiendo dirección noroeste, se mantiene activo hasta en estiaje.

Estas tres cavidades “reinas” de la Serrezuela, extienden de forma paralela y con rumbo noroeste sus cursos activos, que trascurren a favor de estratificación y sobre una capa impermeable de margas y arcilla bajo la zona basal de la capa caliza entre -100 y -125 m.

No parece probable que el curso activo de esta sima se una en unas pocas centenas de metros al río de la Juan Herranz II, a pesar de su proximidad física, por discurrir paralelos y teniendo como surgencia probable el Hundido de Armallones.

 

EXPLORACIONES EN LA SIMA Z3 2017

 

  • El 6 de mayo se realizó una primera visita para valorar posibles trabajos en la cavidad, se identificó y marcó como objetivo el meandro final.
  • EL 20 de mayo en una salida del IEV (Interclub Espeleo Valenciano) a la zona de Valsalobre se prepara un equipo de trabajo para dedicar la jornada del sábado a la cavidad. La planificación inicial de una sola jornada se ve alterada debido a que se consiguió forzar el paso del meandro final y se llegó a la cabecera de un pozo que no se pudo bajar. Se volvió el día 21 para instalar y bajar el primer pozo aparecido después del meandro.
  • Las exploraciones continuaron el fin de semana de la “Fiesta del Humo”, el 9-10 de junio con distintas entradas en viernes y sábado, en las que se bajan los tres pozos después del meandro, las opciones de exploración quedan en una escalada y una revisión más exhaustiva de la zona final.
  • El 9 de julio se inicia una escalada, pendiente de concluir, en la zona final parar buscar alguna ventana que pueda dar continuidad a la sima. Aún quedan incógnitas por resolver, pero las perspectivas nos auguran que ya se ha sacado el potencial que se puede esperar en la zona.
  • El 15 de septiembre se realiza salida de topografía y trabajos en la zona del meandro. Se toman datos de la medida de la sima, y en la parte descubierta se hace la topografía del meandro y los pozos. Se desinstala la zona nueva que llevaba en fijo desde el 10 de junio al dar por concluidos los trabajos en la cavidad.

 

TRABAJOS DE REEQUIPACIÓN COMPLETA DE LA CAVIDAD

 

  • Se opta por realizar la reequipación con anclajes químicos por parte de la Comisión de Conservación y Reequipación de Cavidades de la FCMEC que dirige Fernando Vallecillos. Esto empuja a retomar los trabajos en la cavidad y el 8 de octubre se realiza una visita en la que se vuelve a dejar en fijo la parte final con el fin de facilitar los trabajos de reequipación.
  • El 21 de octubre comienzan los trabajos de reequipación de la cavidad con anclajes químicos. En esta salida se realiza la reequipación completa de la sima conocida.
  • El día 9 de noviembre se finalizan los trabajos de reequipación de las zonas nuevas tras el Meandro de los Valencianos y se retira la instalación en fijo de la zona final.
  • La cavidad queda finalmente con un total de 30 anclajes, siguiendo la ficha técnica que ofrecemos a continuación.

 

FICHA TÉCNICA (Anclajes Químicos, FCMEC 2017)

 

SIMA

Obstáculo

Cuerda

Anclajes

Observaciones

P21

40 m

aN + 2 aQ

2 aQ

1 aQ                 -9 m

1 aQ + 2aQ

 

1 aQ                 -19m

Inicio en árbol. Acceso en travesía.

Cabecera falso factor 2.

Fraccionamiento

Pasamanos hacia lado derecho que evita rampa y cabecera en “Y”

Fraccionamiento

P31

45 m

2 aQ

1 aQ                  -8 m

3 aQ

Cabecera en Y. Permite la bajada limpia de todo el pozo

Fraccionamiento.

Pasamanos hacia derecha para acceso a P44 sin bajar hasta base P31.

P44

60 m

1 aQ                 -1 m

1 aQ                 -4 m

1 aQ                 -8 m

1 aQ                 -29m

Fraccionamiento.

Fraccionamiento.

Fraccionamiento.

Fraccionamiento.

MEANDRO

Obstáculo

Cuerda

Anclajes

Observaciones

R 4

70m

15m

2 aQ

1 aQ                 -4m

Cabecera en Y 1 en cada pared

aproximación a P11 salida incomoda

P 11

20m

2 aQCabecera pared derecha

P 9

15m

1 aQ

2 aQ

Aproximación pared izquierda

Cabecera en P9

P 12

20m

1 aQ

1 aQ

2 aQ

1 aQ                 -12m

Pared izquierda

Aproximación cabecera

Cabecera pared izquierda

Salida del agua en la base

 

aN = Anclaje Natural

aQ = Anclaje Químico

 

DESCRIPCIÓN DE LAS ZONAS NUEVAS

 

La base del último pozo conocido hasta entonces (P44) consiste en una rampa cuya parte superior forma una amplia zona encharcada en época de lluvias. En la parte baja de la rampa y a nuestra derecha, encontramos una bonita colada que con tonos ocres y amarillos asciende más de una veintena de metros. A la izquierda de esta colada, en la parte más baja de la rampa y con otra comunicación superior, se abre el acceso, de no más de 1 m. de alto, al Meandro de los Valencianos. Sería recomendable el cruzar dicho meandro sin el equipo, para evitar enganchones y ganar espacio para uno mismo. El meandro permite el paso de gente más menuda con el equipo puesto y es factible para personas de 1,80 m y 90 kg.

El Meandro de los Valencianos, exigente pero disfrutón, marca un giro a la izquierda de 90º en su mismo comienzo, dejando una pequeña marmita a la derecha que recoge el agua procedente de la colada del P44. Tras este giro el meandro nos obliga a arrastrarnos sobre su parte alta, la de mayor anchura, hasta dar un nuevo giro, ahora a la derecha, a partir del cual el meandro mantendrá un rumbo general 280º norte, ganará altura y mantendrá una anchura no superior al medio metro. En este primer tramo rectilíneo encontramos la primera estrechez, Paso de Supermán, fácilmente superable de lado y con los brazos por delante. La forma de sortear este paso (de lado y con el cuerpo horizontal) será la misma que debemos usar en otros tres puntos. Entre los siguientes pasos estrechos tenemos zonas donde podemos erguirnos, debido a que el meandro va ganando altura según nos adentramos. A pesar de alcanzar en algunos tramos una altura de 5 metros sólo  permite el paso en unos puntos determinados. A los 30 metros se abre a una pequeña sala, previa al paso que da acceso a la parte inferior del meandro. Allí podremos agruparnos de forma cómoda y volver a ponernos el equipo.

En esta sala podemos considerar que empezó la exploración en 2017 pues alguien llegó hasta aquí y colocó un hito de piedras. Vaya nuestro reconocimiento a este “explorador desconocido”.

La bajada a la parte inferior del meandro se puede realizar en libre, aunque encontramos anclajes en ambas paredes, que permiten montar una cuerda de apoyo para minimizar riesgos. Aquí ya nos encontramos en la base del meandro, donde reaparece el agua con un caudal variable dependiendo las precipitaciones y la época del año, pero podemos confirmar que en un año especialmente seco, este curso nunca se ha interrumpido.

Nada más bajar encontramos, rio abajo, un anclaje de aproximación a la siguiente vertical, un P11 de acceso estrecho e incómodo, en el que nuestro propio equipo nos lo puede dificultar. Esta es la última estrechez que nos presenta la sima en su descenso.

Aquí empieza el verdadero motivo de esta visita para aquellos que no hayan disfrutado del meandro. Tres espectaculares descensos que van acompañando la bajada del agua por unas bonitas coladas y banderas. El agua en la base forma unos bellos gours que contienen formando diques, el agua en su fluir.

Las dos siguientes verticales, P9 y P12  se suceden de manera casi concatenada y encontrándose la base del P9 inundada en su totalidad, accedemos a zona seca en la propia aproximación a la cabecera del siguiente P12. Estos dos pozos no se fraccionan para facilitar la salida del agua que ocupa la base de ambos y que, dependiendo la época, puede superar la altura de la bota.

En la zona final encontramos unos volúmenes considerables, con alturas de techo de 30 metros. En su parte izquierda aparece una pequeña subida formando una sala anexa, donde más anchura alcanza la cavidad. Termina el agua del último lago pasando por una gatera, a través de la que llena una marmita que desahoga por un pequeño canal impenetrable.